Durante el invierno, no hay nada que nos apetezca más que pasarnos el día esquiando en Grandvalira. Pero, ¿qué podemos hacer cuando se cierran las pistas?
Desde el Hotel el Tarter te proponemos visitar Caldea, el centro termal más grande del sur de Europa y uno de los sitios más emblemáticos de Andorra.
Las aguas termales
En el centro de nuestro pequeño país, más concretamente en Escaldes-Engordany, brotan aguas termales a más de 70ºC. Son precisamente estas las que se utilizan en Caldea por su composición. Sus altos niveles de minerales como el sodio, calcio y el potasio entre muchos otros, les otorgan las cualidades perfectas para recuperarse después de un día de esquí. Una vez te sumerjas en la laguna central del espacio termolúdico, sentirás como el cansancio se desvanece de tus músculos y como la tensión acumulada desaparece.
Las instalaciones
El espacio termolúdico de Caldea te propone diversas zonas para conocer el termoludismo, la vertiente más divertida del termalismo. Descubre los efectos de los cambios de temperatura en tu cuerpo en los baños indoromanos, siente cómo el eucalipto llena tus pulmones en el hammam o simplemente estírate en una de las camas de burbujas de la laguna exterior mientras admiras las montañas que te rodean. ¡Las posibilidades son infinitas!
Para los niños
Caldea cuenta con un nuevo espacio totalmente pensado para los más pequeños: LIKIDS. En él, mientras los padres recorren el resto de las instalaciones, los más pequeños podrán jugar con otros niños de su edad, escuchar un cuento o descubrir el mundo de los tratamientos con mascarillas de yogur o manicuras. Toda una experiencia con la que se familiarizarán con el mundo del spa.